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*todas las ilustraciones han sido editadas a partir de fotos halladas en la red.

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sábado, 13 de agosto de 2011

Capítulo 39: El filo de la justicia


Se ha especulado mucho sobre la afición innegable de Lady hacia las armas blancas, principalmente hacia las espadas. Por lo menos en los últimos tiempos ella ha preferido actuar aplicando sus correctivos muñida de afiladas y ágiles hojas de acero que no se constituyen en algo usual en el entorno en el que se mueve.



Como ha quedado evidenciado a lo largo de sus múltiples incursiones justicieras, recopilando datos y analizando científicamente los rastros de sus improntas y las características en las heridas de sus víctimas, los expertos han llegado a concluir que no emplea la misma en todas sus intervenciones. 
Ha quedado constatada la utilización por su parte de varias decenas de espadas diferentes, todas igualmente mortales y efectivas en sus manos, pero de distinto porte, peso, forma de hoja y características morfológicas.


Además, entre las muy pocas imágenes que sus fanáticos y paparazzi han logrado captar de ella mientras incansablemente la persiguen en medio de la oscuridad de la noche, como así también por las descripciones que han logrado dar algunos pocos testigos privilegiados –generalmente rescatados de las garras de la delincuencia y de sus maltratadores- se ha podido corroborar visualmente que las armas que viene utilizando durante sus intervenciones no siempre son las mismas.



Las hay más cortas, más sencillas, de mayor porte, más ornamentadas, más impactantes, de hoja más delgada o más curva. Es evidente que según sea la ocasión, la conveniencia  o el humor, ella suele optar por diferente compañera a la hora de salir al encuentro de sus despreciables enemigos.

Hay hasta quien especula que por algún extraño ritual de mágico contenido no puede reiterar el uso de la misma arma con frecuencia, que se debe alternar el contacto de las espadas frente a la sangre enemiga.




Otros, pretendiendo ser entendidos en las artes de guerra de la antigua escuela, entienden que dicha actitud de variar el arma en las sucesivas batallas no es algo propio de los más famosos guerreros. Más aún, sostienen que en otros tiempos, cada quien hacía de su arma una parte esencial e irreemplazable a la hora de la lucha y que existían fuertes temores, cábalas y malos augurios ante la sola idea de tener que cambiar de arma al enfrentar al contendiente. Hasta se sospecha que existía un vínculo especial entre guerrero y espada surgido de algo parecido al afecto que iba creciendo a medida que se sucedían las distintas batallas. Pero no parecería ser así en el caso de Lady. Por lo menos no lo es en la actualidad.


Quizás nunca sepamos con exactitud cuál es el motivo que guía a la dama felina en esas elecciones. Tal vez ese secreto permanezca por siempre ajeno a la impertinente curiosidad de los científicos.


Cabe suponer que habrá fuertes justificaciones emotivas, técnicas o de practicidad efectiva que escapen hasta al más experto ojo inquisidor, siendo lógico suponer que entre los motivos más vitales para su cuidadosa selección habrá entre las circunstancias sopesadas algunas que no puedan ser medidas con la simple intervención de la ciencia y el raciocinio, quedando por siempre sumergidas entre las nieblas de lo que se no se nos es dado conocer.



En todo caso, la efectividad del accionar de la susodicha no se ha visto nunca alterada por la calidad del arma que elige en cada oportunidad por lo que quizás resulta ser más determinante la fuerza de su espíritu justiciero y combativo que las características del filo que eventualmente utilice.

4 comentarios:

  1. Podríamos suponerla con veinte armas de corte: cada una de las uñas de las cuatro patas de un felino.
    Sea como sea, la autora de los textos es una "estudiosa" de Lady...

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  2. Hola Mónica,
    Bué, tranquila, que esto no es preocupante… Está claro que los superhéroes, al igual que los humanoides, también tienen sus pequeñas manías, gustos y fijaciones, che…
    Hoy, por ejemplo, he hecho una pequeña incursión investigadora en los estudios sobre el “capitán América”.. El tipo, siempre utilizaba para las misiones (y como única arma), su escudo.. y fuera lo que fuera, lo que tuviera por delante y en su contra (aunque fuera un cañón desintegrador de partículas)… !y nunca lo perdía! (con lo fácil que es perder algo así, en plena batalla campal contra todo un ejército)…
    Claro está, que, al igual que los humanoides, hay superhéroes más maniáticos y/o con preferencias más fijas y definidas que otros… Ahí tenés, por ejemplo a SBES que, tras todos los estudios realizados, la única conclusión obtenida es que él, se había con lo primero que tenga más a mano… ejejejej
    En fin, sea cual sea el motivo de Lady Dark para usar los aceros afilados, creo que este siempre será un asunto formal.. lo importante es que pueda continuar ejerciendo su tarea…
    Un abrazo
    PD: sssh.. sin que Lady se entere… si querés apuntar mi humilde opinión.. creo que es una cuestión de “elegancia”.. creo que Lady, en eso, es bastante exigente, che.. :)

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  3. tienes un blog impactante!!!!
    abrazos

    www.elblogdeescarcha.blogspot.com

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  4. Vamos a ver, claro que tiene muchas espadas, no sé porqué tenga que tener una sola, igualmente que tiene mucha ropa, sería impensable que siempre fuera vestida igual, no, Lady es femenina, felina, coqueta, muy gatuna... es evidente que tiene que tener un repertorio variado de espadas igual que tiene un repertorio variado de prendas, y no por esa variedad va a restarle cariño a las mismas, sus espadas son sus espadas, fieles compañeras, cómplices con ella de la necesaria justicia

    Mil besitos gordotes

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